3/14/2006

"ODISHON" AUDITION


Os quería hablar de Audition: “Odishon”, la historia relata como nuestro protagonista “viudo”, pretende rehacer su vida. Y claro está como no podría de ser de otra manera, realiza una audición para una película, pero en realidad es un “casting” para elegir a su futura mujer. Es aquí donde conoce a una bellísima persona que lo encandila y de la que empieza a conocer en aquél momento. Pero todo en esta vida no es lo que aparenta y detrás de esa bellísima persona que aparenta ser esta joven, se encuentran varias incongruencias. Poco a poco nuestro protagonista va descubriendo que existen dos lados de la navaja y que el supuesto “currículum” que entregó la joven durante la audición no es completamente verdadero, o al menos no se puede verificar que lo que dice es verdad. Esto llevará a uno de los finales más “realistas” y “poco románticos” que he visto en mucho tiempo.La verdad es que la película transcurre en un ambiente distendido, “melancólico” y algo “romántico”; poco a poco, el ambiente se va “enturbiando” conforme se va descubriendo que la joven no es lo que aparenta ser, y las pequeñas pinceladas que nos van dejando “ver” la realidad, hace que la película se vaya distorsionando hasta llegar al final tan cruel y “realista” a la vez. Creo que podríamos hablar de que la vida real es tal cuál es, y que la realidad puede llegar a ser las dos caras de una misma moneda. No es que se oculte la verdad, si no que, al igual que el personaje, vamos descubriendo una realidad que no conseguíamos (o queríamos) observar. Sobre todo si estamos influidos por el aspecto “exterior” de las personas (también enamorados, ¿porque no?) y que al ir arañando la superficie conseguiremos llegar al “interior” de las personas, y ver un poco más de esa “cruel” realidad. Crueldad que nos hace observar como el ser aparente más “frágil”, es en realidad todo lo contrario, y consigue hacernos estremecer, vaya si lo hace, en esa escena final, digna de este director. Y un “delicatessen” para los seguidores del cine “bloody” (cuña mía…), que hace que llamemos a este director “el equivalente a Tarantino pero en Japón”.
MADMAX