Digamos que el motivo del artículo, más que para presentaros una ‘pequeña joya’ es para rememorar viejos tiempos de un sevidor y hacer un homenaje al autor que consiguió hacerme entrar en este mundillo hace ya 20 años.
Sin duda Akira Toriyama con su serie “Bola de Drac” (Dragon Ball) nos hizo vivir en mundo diferente lleno de fantasía, amistad, ánimo de superación y la eterna lucha contra el mal. Todo ello aderezado con peleas, torneos de artes marciales y luchas feroces para vencer a los ‘enemigos’ que quería de una manera u otra conquistar el planeta.
Hace 20 años no había internet y las noticias de la serie llegaban a cuentagotas a través de ‘fanzines’ y/o revistas especializadas, que por aquél entonces no eran muy abundantes.
Así que por colegios e institutos, y sobre todo tiendas de fotocopias, empezaban a correr capítulos de la serie en japonés directamente de los tomos originales.
Así que ya os podéis imaginar sin saber japonés, la cantidad de ‘bulos’ que podían correr por el mundo y personajes que aparecían de los que no sabíamos apenas nada. Así que a través de estas rudimentarias fotocopias en blanco y negro, inicialmente, se hacían copias y copias hasta ser una versión totalmente desvirtuada de la fotocopia original. Unos años más tarde llegaron fotocopias a color de calendarios,portadas de tomos japoneses, artbooks varios y un largo etcétera.
Mi fuente principal de fotocopias venía de mis compañeros del instituto, de algunos quioscos y tiendas de fotocopias del barrio y, sobre todo, de mis visitas dominicales al famoso mercat de Sant Antoni en Barcelona. Desplazarme hasta allí era un simple trámite, pues al vivir en Hospitalet, podía acudir más o menos de manera habitual. Allí se abrió un mundo de posibilidades: ppcards (tarjetas de juegos estilo rol a color), tomos japoneses, fotocopias de los últimos tomos publicados en Japón, cd con bandas sonoras,etc,…
También podíamos disfrutar de la serie blanca y más tarde de la roja en catalán y Planeta de Agostini, para números o épocas especiales solía incluir pequeños regalos a modos de posters en los tomos que editaba. Además podíamos contar con artículos de los diferentes videojuegos que llegaban a nuestro país y yo, no me cortaba un pelo y me dedicaba a hacer mis 'montajes' con las páginas a color de las ediciones de alguna hobby consolas o alguna revista similar de la época.
Como podéis comprobar este artículo va destinado a las fotocopias b/n y a color que todavía tengo por casa. Os dejo una muestra de ellas para que las podáis disfrutar si gustáis.
Mata Ne!!!
2 comentarios:
Ése calendario del 95 lo tengo por ahí perdido yo también... Qué tiempos aquellos, jejeje
Las fotocopias y posteriormente los posters. No veas que recuerdos. Aun conservamos las fotocopias que intercambiamos y coleccionábamos en nuestra edad escolar. Las tenemos todas guardadas en una carpeta (obviamente de Dragon Ball xD) ^^
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